Mundo de hipocresía.

Reflexión sobre la vida, en una camioneta azul, volviendo de Capital, ahogada de contaminación.

"110 cuadras nuevas de pavimento" (números en blanco, letras en verde) Que ironía, no? Pero espera, espera que te aplaudo, que te felicito. Más que nada te felicito por sacarle lugar a la madre tierra, a lo único hermoso que hay en este mundo de hipocresía. ¿Cómo sería todo, si lo más importante, y lo más valioso, fuera el amor? El amor pero no solo de una pareja, sino, el amor a la vida, a lo que esta nos brinda, al sol, a la luna, generalizando, a la naturaleza. Hoy en día la gente no sabe valorar estas cosas, estamos metidos, y somos, (aunque no lo queramos ser), parte de este maldito sistema, un sistema el cual nos consume, nos mata psicológica y físicamente también. ¿Porque físicamente? Bueno, pongo el ejemplo de una chica que conozco, ella es modelo, es flaquísima, demasiado, pero si ella adelgazara de caderas, puede ganar aún más plata. Y ¿Ella que hace? Se enloquece, y lo va a cumplir, va a poner en riesgo su salud para ganarse unos pesitos más... Quien sabe, quizás eso la haga feliz. A que alturas llegamos, ¿No?

La verdad, una verdad desnuda mía, es que me apasiona la comedia musical, mejor dicho, el teatro. Es una pasión que espero algún día poder llegar a brillar, pero ese no es el punto. El punto es que, creo que eso es lo que más me gusta, por el hecho de que podemos esconder de alguna manera, fingir y actuar, pero si somos inteligentes, lo podríamos usar para demostrar la cruda realidad, lo que en realidad está pasando, para hacer entrar en razón a la gente. Mucha gente se cierra, y es ignorante, no saben o quizás, mejor dicho, no quieren saber, ni enterarse de todo lo que pasa, y... Creo que hay un dicho que bien dice: "No hay peor ciego, que el que no quiere ver". 

Lo que en realidad quiero decir, es que hay algo más allá que nuestras propias narices. Si la gente fuera diferente, si nuestras razones de vida fueran como antes, trabajar y cultivar, para solamente conseguir alimento, un techo, y las necesidades mínimas y básicas, para poder mantenernos en pie, dejando de lado el consumismo, y toda la mierda que lo rodea. Nos falta educación, nos falta aprender a valorar, a respetar y a cuidar lo que es pura y exclusivamente nuestro. Nos falta felicidad, risas y pasión; Nos falta entusiasmo, paciencia, VALOR y CORAJE. Pero lo más importante, nos falta amor, y si no hay amor, ¡Que no haya nada entonces! 
Hay que abrir los ojos, hay que reflexionar sobre lo que somos, y lo que podemos ser, contactarnos más con la naturaleza, ser libres y expresar lo que sentimos. Y puedo asegurar, que en el preciso momento en que eso suceda, vamos a poder encontrar la verdadera felicidad.

"Abre los ojos y besa el sol"